Alopecia androgenética – La calvicie androgénica, ocasionada por un aumento de la actividad de las hormonas masculinas y la predisposición genética, es la responsable del 90% de los casos de pérdida del cabello.
La innovación tecnológica ha permitido en los últimos años, acabar con la alopecia, uno de los complejos físicos más temidos por hombres y mujeres.
Alopecia androgenética
La pérdida permanente del cabello afecta a un alto porcentaje de la población, sobre todo al género masculino, aunque gracias a centros especializados, que aplican las novedosas técnicas que la combaten, el número de personas que tiene que enfrentarse a las consecuencias estéticas y psicológicas de esta patología, es cada vez menor. Entre los tratamientos más exitosos, destaca la técnica FUE (Follicular Unit Extraction), la cual logra destacar por sus excelentes resultados.
Según la Sociedad Internacional de Cirugía de Restauración del Cabello conocida como la ISHRS por sus siglas en inglés (Society of Hair Restoration Surgery), existen numerosas causas por las que una persona puede perder su cabello natural. Desde el estrés continuado, hasta enfermedades que desencadenan varios tipos de calvicie pueden ser, en ocasiones, algunos de los motivos. Otros factores, como el abuso de productos para limpiar el cabello, tratamientos agresivos para cambiar su forma o color, o situaciones determinadas como el embarazo; también pueden ser responsables de este cambio físico que afecta ya, según el Instituto Nacional de Estadística (INE) a más del 70% de los hombres y a casi un 50% de las mujeres a nivel mundial.
Para la tranquilidad de muchos, los profesionales en la actualidad, se encargan de realizar exhaustivos estudios de forma individual con el fin de evaluar las necesidades de cada paciente y realizar la técnica de injerto capilar de la forma más segura y eficaz.
A la hora de llevar a cabo el estudio personalizado se detecta rápidamente el tipo de alopecia que afecta al individuo.
Según apunta la ISHRS, existen muchos tipos calvicie como la Cicatrizal, la Areata o la Universal; pero es la alopecia Androgenética la que más casos contabiliza a día de hoy.

Alopecia Androgenética, común en hombres y mujeres
La Alopecia androgenética, también conocida como Alopecia androgénica, es el tipo de calvicie más común y puede afectar tanto a hombres como a mujeres, aunque éstas la padecen con menor asiduidad.
En el caso de los hombres que sufren pérdida del cabello, este tipo de alopecia es la culpable en el 90% de los casos, de ahí que esta patología sea coloquialmente conocida como alopecia común. Su causa, la más temida entre adolescentes que comienzan a percibir síntomas a edades muy tempranas, es la herencia genética, por lo que se trata de una situación prácticamente imposible de evitar en la mayoría de los casos. A pesar de poder reflejarse en menores de edad, lo normal es que las primeras etapas de pérdida de pelo notable comiencen en edad adulta, sobre todo a partir de los treinta años.
En el caso de las mujeres, sin embargo, la calvicie suele comenzar, casi siempre, en etapas cercanas a la menopausia, justo cuando se produce una disminución notable de hormonas femeninas coloquialmente conocidas con el nombre de estrógenos.

Evolución de la calvicie androgenética
En los pacientes con alopecia androgénica, las hormonas masculinas actúan de forma más intensa de lo normal, lo que provoca que el pelo se vuelva muy fino con el paso del tiempo, hasta desaparecer en su totalidad alrededor de varias zonas del cráneo. La pérdida del cabello no es algo que suceda de un día para otro, aunque como regla aplicable a casi todas las patologías, la prevención suele resultar en una apuesta segura. Y es que si hay algo en lo que los especialistas coinciden es que cuanto antes se trate, más posibilidades existen de obtener un resultado exitoso.
Este proceso paulatino de pérdida del cabello, es lo que se conoce como miniaturización, y no es más que el debilitamiento progresivo que sufre el pelo.
En hombres, la pérdida del cabello comienza a notarse por la parte frontal, continuando progresivamente hacia una zona más cercana a lo que se conoce como coronilla, la cual también se verá afectada en quienes sufren este tipo de alopecia. De esta forma, los hombres víctimas de esta modalidad de calvicie, tan solo conservarán el pelo por las zonas laterales y la parte posterior de la cabeza.
En mujeres sin embargo, la pérdida del cabello es totalmente distinta. Así como en los hombres con alopecia androgénica la frente queda totalmente despoblada, las mujeres tienden a conservar el pelo en esa zona y a perderlo por la parte superior de la cabeza, aunque en casos muy extremos, la pérdida del cabello puede llegar a extenderse por otras partes del cuero cabelludo. Esta característica en particular hace que muchas mujeres tiendan a evitar recogerse el cabello en épocas tempranas de la patología, aunque cada vez más personas tienden a acudir a clínicas especializadas para acabar con la calvicie. Tanto es así que, según datos de ISHRS, el número de tratamientos capilares para la recuperación del cabello o para la prevención de su caída, aumentaron en España un 50% entre 2014 y 2017 y, según la asociación, los datos van en aumento.
Cómo tratar la alopecia
Al igual que otros muchos tipos de calvicie, la alopecia común o androgenética es tratada, en la mayoría de los casos, mediante la eficaz técnica FUE.
Para lograr un mejor resultado, los expertos recomiendan tratar la patología lo antes posible, ya que un diagnóstico temprano facilita el tratamiento obteniendo resultado visiblemente exitosos. Además, las novedosas técnicas llevadas a cabo por clínicas especialistas en implante capilar, provocan unos resultados muy estéticos, en los que no pueden apreciarse cicatrices tras la intervención.